
En Desarrollo
Los Niños Perdidos
Una Película de Enrique Medrano







Los Niños Perdidos (2026)
1h 30min | Garífuna, Lenca, Tolupan / Español | Hn
Los Niños Perdidos
Formato: Largometraje Ficción
Género: Drama social con elementos fantásticos
País: Honduras
Duración: 90 min
Escrito y Dirigido: Enrique Medrano
Productor: Luis Flores Alvarenga
Casa productora: Thau Honduras
Idioma: Español, Garífuna, Lenca, Tol e Inglés
Subtítulos: Inglés
Estado del proyecto: Desarrollo
Contacto: thaudesignhn@gmail.com

LOGLINE
Tres niños indígenas huérfanos por el desplazamiento forzado de sus comunidades, deberán reconectarse con sus ancestros protectores, el bosque y con sus raíces, para sobrevivir en este mundo lleno de injusticia.
SINOPSIS
En un bosque virginal, dos grupos de colonizadores españoles libran una feroz batalla, para hacerse de la tierra, de la cual muchos indígenas resultan asesinados. El líder de bando vencedor, observa el territorio conquistado, ese paisaje repleto por cadáveres, y descubre cerca de ahí a tres niños indígenas escondidos, que ha quedado huérfanos justo en esa batalla reciente. Estos infantes son tomados como prisioneros y son forzados a entrar en una cueva oscura para buscar oro. Pero no vuelven a salir de ahí jamás.
518 años después de esa tragedia, en distintas partes del país, otros tres niños de distintos pueblos originarios y afrodescendientes de Honduras son víctimas del desplazamiento forzado de sus comunidades.
Massay, un niña garífuna, vive en un poblado caribeño que está siendo expulsado de sus tierras por la construcción de un proyecto turístico transnacional. Agustín, un niño lenca, vive en una pequeña aldea perdida en las montañas de Lempira que lucha por expulsar de su territorio a los constructores internacionales de una hidroeléctrica que contamina sus aguas con la mayor impunidad. Cipriano, un niño Tolupán, en la ciudad sufre la violencia de las maras, quienes amenazan su vida y la de su padre.
Los terribles conflictos en sus respectivas comunidad se vuelven aún más violentos y estos irremediablemente conduce sus vidas a una tragedia que hace que los tres queden huérfanos. Y solo sobreviven a la tristeza y el peligro residual, gracias a la protección ancestral de sus antepasados. Pero esto no evita que desde sus tierras sean enviados a la capital, a un orfanato, en donde Massay, Agustín y Cipriano se conocen.
La adaptación a este lugar resulta compleja. Los adultos los fuerzan a profesar la fe católica y hablar siempre en español, e incluso los obligan a aprender inglés. Sus lenguas y sus creencias no son bienvenidas. El ambiente en este lugar se va volviendo cada vez más opresivo, más tenso, y esto hace que los tres niños vayan formando una fuerte amistad. Y ésta se vuelve una forma de resistir los maltratos que viven en el orfanato.
Cuando Agustín y Cipriano descubren que Massay ha sufrido abusos sexuales, llenos de rabia deciden huir del país, rumbo a los EEUU. Durante el peligroso viaje hacia al norte vuelven a ser visitados por sus antepasados y son guiados por ellos en su largo peregrinaje. Pero esto resulta inútil. Los tres terminan siendo deportados de vuelta a Honduras y regresan al mismo orfanato terrible de antes.
Aquí las cosas empeoran para los tres. Los adultos se toman su escape como un ataque directo a su autoridad y por esto los infantes son constantemente violentados. Ya cuando la situación se vuelve intolerable para ellos, los tres deciden tomar el control del orfanato y hacen una revuelta. Ayudados con los otros huérfanos, incendian este lugar y huyen todos juntos lejos de la ciudad.
Se internan en un bosque inmenso en donde encuentran la misma cueva en la que los primeros tres niños indígenas, hacía 518 años, se habían perdido sin llegar a salir nunca. Guiados por sus espíritus protectores, Massay, Agustín y Cipriano encuentran aquí su ánimas aún extraviadas. Comprendiendo la injusticia que habían ocurrido ahí, ellos toman las osamenta de esos tres niños indígenas y las entierran en el mismo lugar en donde la sangre inocente se había derramado de mano de los colonizadores españoles. Aquí todos los huérfanos forman una nueva sociedad, lejos de la civilización y de los adultos, en donde por fin podrán ser niños en libertad.

MOTIVACIÓN
Honduras es un país que pierde a sus niños, que los abandona; es un territorio con un fuerte olor a orfandad. En él, a menudo nos sentimos desprotegidos, como a la deriva, sin nadie que tenga el control de este barco de país y nos haga sentir que no vamos a naufragar. Lastimosamente, nuestra sociedad y nuestro gobierno, ayudan constantemente a que en el ambiente persista esa sensación de estar a punto de zozobrar. Esto nos hace estar siempre a la defensiva, en un estado enfermizo de vigilia y paranoia que termina reforzando la fuerte raíz de violencia de nuestra idiosincracia. De todo esto habla LOS NIÑOS PERDIDOS, visto desde la óptica de tres huérfanos que infatigablemente deben luchar para sobrevivir en un sistema cruel, decadente y enfermo en el son las personas más vulnerables. En definitiva, esta es una historia sobre cómo Honduras le falla a sus niños y condena con esto a su propio futuro.
ENRIQUE MEDRANO/ Director y guionista

ENRIQUE MEDRANO
Director y guionista, egresado de la EICTV. Sus cortometrajes han sido seleccionados y premiados en festivales como Sitges, Toulouse, Nueva York y Guadalajara, etc. Ha sido seleccionado en el Guadalajara Talents y en el Berlinale Talents. Es el primer cineasta en participar del Curso de Desarrollo de Proyectos de Largometraje Iberoamericanos. Está próximo a rodar su ópera prima “Todas las horas del día”.

LUIS FLORES ALVARENGA
Productor hondureño. 17 años en la producción nacional, En el 2014 fundo la casa productora THAU HONDURAS, En el 2019 realizó su debut en el cine nacional como productor en el largometraje “90 Minutos” (mejor producción en el Festival Icaro Internacional 2021). Ha participado en el Festival Icaro Internacional, ACAMPADOC, BOLIVIA LAB, ademas ha sido becado en FsPI Cine América Centra Panamá 2023, Talents Guadalajara 2023 y Jurado seleccionador de Bolivia Lab